En lo alto de una colina, con vistas al sereno valle de Tjampuhan, se alza un retiro que encarna la esencia más pura de Bali. Pita Maha Resort & Spa, con 24 villas privadas distribuidas como si de una aldea balinesa se tratara, ofrece una experiencia boutique donde la elegancia se entrelaza con la tradición local.
A tan solo cinco minutos del corazón de Ubud, este hotel boutique rinde homenaje al legado artístico de la isla, tanto en su nombre, inspirado en un movimiento cultural que marcó los años 30, como en cada uno de sus espacios, concebidos como refugios íntimos que celebran la artesanía y el alma balinesa.
Es un lugar pensado para viajeros que valoran la autenticidad, el silencio y la belleza sutil. Un destino donde cada detalle invita a detenerse, reconectar y dejar que el tiempo fluya con la calma de la naturaleza.